El grado de invención del dibujante y primer animador de la historia, ÉMILE COHL (1857-1938), es literalmente desbordante. Más de trescientos dibujos animados. Una sucesión compleja y en constante cambio de cosas vistas o imaginadas. Y en ese obrar expansivo, nuestro animador francés comprueba que la torsión de la línea blanca, sobre un fondo negro, contiene infinitas posibilidades, creando una semiología de lo irreal. Una lengua visual sui generis y, por lo tanto, incodificable del todo y que parte de una imagen-línea. Ambigua, fluctuante (e ilimitable) como materia del goce ocular. Vista, su transformación es el placer supremo. Empuje incesante (y extático). Visión hacia delante. Placer que engendra placer. Materia que deviene en otra materia. Caprichosa, impredecible: libre hasta su próximo desdoblamiento. Y entre esos desdoblamientos, el nexo: el espejismo de lo indefinido. Ni una cosa ni la otra. El trance de la invención que une las desformantes formas. Parpadeo infradecimal. La metamorfosis pura, cuya estructura está dada por los nexos. Irrumpe en lo fractal, cuyo ritmo denota la frecuencia de sus mutaciones. La línea vivaz en fuga. LA IMAGEN MUTANTE. Un devenir sin cierre, sin clausura. La magia como técnica de la fantasía. ÉMILE COHL, o la mecánica de la creación.
A.M
Características
Cosido y manufacturado íntegramente a mano. (Con intervención caligráfica en el lomo).
14 x 21 cm, 64 pp.
El grado de invención del dibujante y primer animador de la historia, ÉMILE COHL (1857-1938), es literalmente desbordante. Más de trescientos dibujos animados. Una sucesión compleja y en constante cambio de cosas vistas o imaginadas. Y en ese obrar expansivo, nuestro animador francés comprueba que la torsión de la línea blanca, sobre un fondo negro, contiene infinitas posibilidades, creando una semiología de lo irreal. Una lengua visual sui generis y, por lo tanto, incodificable del todo y que parte de una imagen-línea. Ambigua, fluctuante (e ilimitable) como materia del goce ocular. Vista, su transformación es el placer supremo. Empuje incesante (y extático). Visión hacia delante. Placer que engendra placer. Materia que deviene en otra materia. Caprichosa, impredecible: libre hasta su próximo desdoblamiento. Y entre esos desdoblamientos, el nexo: el espejismo de lo indefinido. Ni una cosa ni la otra. El trance de la invención que une las desformantes formas. Parpadeo infradecimal. La metamorfosis pura, cuya estructura está dada por los nexos. Irrumpe en lo fractal, cuyo ritmo denota la frecuencia de sus mutaciones. La línea vivaz en fuga. LA IMAGEN MUTANTE. Un devenir sin cierre, sin clausura. La magia como técnica de la fantasía. ÉMILE COHL, o la mecánica de la creación.
A.M
Características
Cosido y manufacturado íntegramente a mano. (Con intervención caligráfica en el lomo).
14 x 21 cm, 64 pp.